Prometo no olvidarme

Lo primero que noto es que no tengo tiempo. Luego pienso en lo mucho que pierdo el tiempo. Escribe algo, algo de verdad, y así quizás te parezca que ese tiempo perdido significó algo. Pienso en algo para escribir, pero me da la sensación de que no recuerdo nada. Es como si se hubiese ido todo, como si nunca hubiese existido. Como si toda mi vida la hubiese pasado en el mismo sitio. Juré no olvidarme de nada, y quizás no ha sucedido nada nunca. La culpa es mía. Tendría que haber escrito más para no olvidarme nunca de nada de eso. Ahora se ha ido. Ahora tengo que buscar cualquier otra cosa de la que escribir. Alguna cosa que no exista y que me recuerde a ti. Ahora me parece que todas esas cosas que juré no olvidar solo pasaron en mi cabeza. Ahora tengo que pintarlo todo del tono emocional de las flores, porque solo así es como las cosas me recuerdan a ti.

Noto que todo está cambiando. No me adapto a los cambios porque me cago de miedo. No me adapto a la vida porque me cago de miedo. Miro el móvil. Eso no arregla nada, pero miro el móvil. A ver si me hablas. A ver si me dices algo que me cambie la cara. Voy a dormir y miro el móvil. A ver si me duermo y me despierto siendo otro. Me quedo pensando en que todo está cambiando y que me da miedo. Es una pena, pero qué importa. Estás tú solo pensando en eso. Miro el móvil a ver si me hablas. A ver si me dices que no hay nada a lo que tenerle miedo. Me despierto y vuelvo a mirar el móvil, pero no hay nada.

A partir de ahora no quiero olvidarme de más cosas, no voy a olvidarme de nada más. A partir de ahora voy a llevarme todo dentro. Voy a llevarme todo dentro como un tesoro. Voy a llevármelo como una maldición. Prometo llevarme todo dentro. Todas esas veces en las que me hablas y se me cambia la cara. Tienes cosas de las que escribir, cosas de las que no puedes olvidarte. No quiero que pase. Como la primera vez que te miré a los ojos y que sentí que el resto de mi vida solo podía ser eso. Como la primera vez que dijo mi nombre y me dio un abrazo y un beso. Como ese verano infinito que pasamos perdiendo el tiempo. Prometo no olvidarme de nada de esto.